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Técnicas básicas
Mantenimiento del aerógrafo
El aerógrafo es seguramente la herramienta más importante que uno puede tener en su zona de trabajo. Nos permite dar unos finos acabados de pintura a nuestras maquetas, cuando funciona. No hay nada peor que prepararse para empezar una sesión de pintura de una maqueta y que el aerógrafo funcione mal o no funcione en absoluto.
Los aerógrafos son como cualquier herramienta, necesitan un mantenimiento correcto si uno quiere tenerlo preparado para trabajar. En otros artículos ya se ha explicado cómo limpiarlo.
PROBLEMAS y soluciones
Mantener el aerógrafo limpio es la mejor manera de evitar problemas, pero siempre habrá cosas que puedan ir mal. Aquí se detallan algunos fallos comunes y cómo solucionarlos.
Aguja doblada
No importa cuán cuidadoso uno sea, es casi inevitable que la aguja se doble. Un mínimo doblez estropeará la salida de pintura, dando como resultado salpicaduras de color.
El doblez puede ser invisible al ojo. Si uno sospecha que una aguja está doblada pero no lo puede ver, pasar la yema del dedo por la punta (sin apretar, o podríamos empeorar el doblez o clavarnos la punta en el dedo). Con el roce se notará si está la punta doblada.
Se pueden corregir los pequeños dobleces pasando una lima muy fina por la zona doblada, comprobando el resultado con el dedo después de cada pasada.
Los dobleces grandes no pueden corregirse. Hay que substituir la aguja. Como no son muy caras, es recomendable tener una en reserva para estos casos.
Boquilla rota
Forzar la aguja a salir por la boquilla puede agrietar o romper el fino metal de la boquilla. El resultado es una salida de pintura poco uniforme y con salpicaduras. No hay solución para este problema excepto substituir la pieza.
pulsador flojo
Algunas veces cuando se utiliza el aerógrafo después de que no haberlo utilizado por algún tiempo, el pulsador se mueve sin control y no se posiciona de forma correcta. Esto ocurre cuando falla el mecanismo de la aguja. Solo hay que desmontar la sección trasera del mecanismo y volver a atornillarla en su lugar.
Pulsador pegado
Si el pulsador no se mueve cuando vamos a utilizar el aerógrafo será porque la aguja está pegada al aerógrafo. La causa más probable: pintura seca en el interior. Es el momento de limpiar el aerógrafo a fondo. Si no se puede sacar la aguja a mano, añadir un poco de disolvente al hueco y dejarlo en remojo unos minutos para que se diluya la pintura. No forzar una aguja pegada.
El pulsador se mueve, pero la aguja no
Apretar la sujeción de la aguja.
con el pulsador cerrado sale pintura
Esto ocurre cuando la aguja no está bien acoplada a la boquilla. Aflojar la sujeción de la aguja y con cuidado empujar la aguja hacia la boquilla. Si esto no arregla el problema, hay probablemente una obstrucción como pintura seca o restos de los cepillos de limpieza. Desmontar y limpiar el aerógrafo.
Sale aire pero no pintura
Pueden haber un par de causas para esto. Primero, que la boquilla esté obstruida. Limpiar el aerógrafo debería arreglar el problema. La segunda causa es que la abertura de aire del recipiente de pintura esté bloqueada. La tapa del recipiente de pintura tiene un pequeño agujero para que entre el aire en el recipiente. Si el agujero está obstruido se crea una succión que impide expulsar la pintura por el aerógrafo.
La pintura no sale pulverizada
Es posible que la salida de aire no esté sellada correctamente y deja escapar el aire. Asegurarse que está apretada con la mano (no utilizar alicates para apretar las uniones del aerógrafo, uno se arriesga a apretar demasiado las juntas o alterar la forma de piezas delicadas y acabar estropeando el aerógrafo). Si sigue fallando, aplicar un poco de cera a las roscas.
Guardar el aerógrafo
Guardar el aerógrafo de manera correcta es tan importante como su limpieza. Si uno lo utiliza mucho, lo mejor es tener en la zona de trabajo un soporte o peana permanente para sujetarlo. Si no, simplemente guardarlo de manera que quede en una posición correcta, sin presión sobre el pulsador, la boquilla o la aguja.
La mayoría de aerógrafos vienen con una protección para la salida de aire de plástico o metal. Esa protección cubre la boquilla y la aguja cuando no está en uso.
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