Mariano Fortuny y Marsal (Reus(Tarragona),1838-Roma,1874).
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Marià Fortuny y Marsal |
- Nació en Reus(Tarragona) en 1838.
- Murió en Roma en 1874.
- Fue pintor, dibujante y grabador.
- De una familia de artesanos, fomentado por su abuelo modelador de figuras de cera, asistió a la escuela municipal de pintura (1847) y al estudio Domènec Soriano, donde pronto mostró gran facilidad para pintar.
- Quedando huérfano en 1850, fue a vivir con su abuelo en Barcelona (1852), donde un amigo viejo, el escultor Joan Roig i Soler, introducido en el Domènec Talarn, lo ayudó.
- Pasó por el estudio de Claudi Lorenzale, y en 1853 entró en La Llotja, donde la doctrina de Nazarene era preeminente.
- Huyendo del cólera, en 1854 fue a Berga y al Santuario de Queralt, donde realizó paisajes (Instituto Gaudí, Reus) y, volvió a Reus, pintando "El Dr. Alberich visitant un malalt de cólera" un óleo todavía superficialmente pintando, pero un documento realista y vivaz.
- De vuelta a Barcelona, por la institución de pensiones por la Academia de Bellas Artes, en 1857 promovida por el Diputación, ganó el primer prémio, con "Berenguer III al castell de Foix".
- Andreu de Bofarull lo pagó su exención al servicio militar; marchó con Josep Armet a Roma (1858), donde quedó impresionado por las Salas Vaticanas de Rafael y por el Velázquez "Inocencio X". Asistió a la academia Giggi y en sus cercanías realizaba paisajes de la naturaleza.
- En 1859 recibió una comisión de la Diputación de Barcelona propuesta por Manuel Duran i Bas, entonces diputado, para pintar la guerra en Africa, que había empezado. De Febrero a Abril, sobre los campos de batalla de Marruecos, tomó numerosas notas que trajo a Madrid donde visitó el Museo
del Prado y regresó a Barcelona.
- Siguió un viaje rápido a Versailles para ver las grandes pinturas de guerra de Horace Vernet, y volvió a Roma donde pintó la "Odalisca", la acuarela "Il contino", de técnica prodigiosa (Museo de Arte Moderno, Barcelona), con lo que la Diputación organizó una exposición.
- Visitó Florence (1862) y nuevamente Marruecos. Establecido en Roma, donde logró grande prestigio, pintó en base a sus notas y a un esbozo táctico por el General Prim, la gran Batalla de Tetuán (10 por 3m.)(1862-64), (Museo de Arte Moderno, Barcelona).
- En 1865 la Reina Maria Cristina de Borbón le dió una pensión para que pintara.
- Entonces el negociante de París Adolphe Goupil lo llamó y lo ofreció la oportunidad de finalmente resolver sus problemas financieros.
- Después de pasar por Madrid, fue a París, donde una exposición anterior de sus trabajos le había dado mucho prestigio, y llevó "El col·leccionista d'estampes". Durante una nueva estada en Madrid (1867) se casó con Cecilia de Madrazo, hija de Federico de Madrazo, y comenzó "La Vicaría", que continuó en Roma, donde estableció un estudio.
- Nuevamente en París (1869), terminó "La Vicaría" , con que la galería Goupil obtuvo uno de los más resonantes éxitos en el historial de la pintura (1870).
"La Vicaría" (ambiente gollesco).
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La Vicaría | La Vicaría |
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La Vicaría |
- En 1870-72 vivió en Granada, donde continuó con el grupo Goupil y pinta "Noia morta" (Museo de Arte Moderno, Barcelona).
- En Roma (1872-74) pintó "L'elecció de la modelo" y "El jardí dels poetas". Después de un viaje rápido a París y Londres, volvió a Roma. Los paisajes luminosos de la playa de Portici están desde esta etapa italiana.
- Fue un hombre de intereses artísticos amplios, reunió una importante cantidad de arte y objetos exóticos, y era un entusiasta ferviente de Beethoven. Un pintor sumamente minucioso y extraordinariamente diestro, en todos lados popular por sus temas moriscos.
- En sus pinturas más convencionales se ve la perfección de su técnica, uno frecuentemente encuentra las figuras de una fuerza extraordinaria, que recuerdan a Goya, y remedios cromáticos originales.
- Trás su estancia en Granada, sus colores luminosos, dados a conocer en Marruecos e intensificados en Italia, llegan a ser mucho más libres y más nítidos, con un alcance que ha sido consecutivamente relativo a la naciente escuela impresionista, una corriente a la que estaba encadenado por su gusto.