Nerium oleander L.
Deriva del griego nerion, origen del latín nerium, asociado a Nereus dios del mar y padre de las Nereidas. Oleander viene del latín olea (olivo) y de dendron (árbol).
Castellano: Adelfa (del griego dafne derivando del árabe ed-defla), aloendro, balandre, loendro, mataburros, nerio, oleandro.
Catalán: Baladre (de veratrum, otra planta tóxica), oleandre, llorer rosa.
Eusquera: Eriotz-orri (hoja de muerte).
Alemán: Oleander.
Inglés: Oleander.
Francés: Laurier rose.
Griego: Rhododaphne (deriva de rosa -rhodon- y de laurel -daphne-, aludiendo a las flores y a les hojas).
Italiano: Oleandro.
Portugués: Loendro, adelfa.
Arbusto alto, de hasta 4 m de altura, con tronco recto, de corteza lisa y color entre pardo y gris. Se presenta muy ramificada desde la base del tronca con ramas gruesas, rectas y flexibles que supuran látex al romperse.
El sistema radical es potente y puede profundizar mucho en terrenos sueltos, lo cual le facilita la supervivencia en zonas áridas.
Presenta durante todo el año unas hojas simples, opuestas o ternadas (tres en cada nivel), de limbo endurecido y lanceolada, agudo en su extremo. El pedúnculo es corto.
Florece en verano con flores grandes de color rosa intenso (también pueden ser blancas), agrupadas en racimos en el extremo de los brotes del año. Los frutos son alargados, con una cubierta endurecida y con forma de vaina que contiene unas semillas alargadas y peludas en el extremo. En condiciones idóneas puede mantener-se con flor hasta el otoño.
Indiferente en cuanto a suelos, soporta terrenos muy áridos siempre que disponga de humedad freática o de algún período húmedo, incluso si este es corto. También soporta la salinidad ambiental que origina la proximidad del mar pero no concentraciones elevadas de sales en el suelo.
Prefiere climas suaves, sin heladas intensas, aunque en buenas condiciones soporta heladas fuertes. Es típica de les comunidades de ribera de torrentes discontinuos en zonas áridas de la zona mediterránea y la podemos encontrar desde el nivel del mar hasta casi los 1.000 m. Muy cultivada, se usa como ornamental en todo el litoral mediterráneo. Puede vivir en terrenos alcalinos con presencia de óxidos.
Se reproduce con facilidad de semilla o por estaquillas y brota bien de tocón o raíz. En la península ibérica normalmente la encontramos en las riberas de los torrentes de la tierra baja desde cerca del Ebro hasta Alentejo en Portugal. Ornamentan muchos barrancos de Sierra Morena o Alicante y es muy común en ramblas y torrentes de las Islas Baleares.
Su presencia en nuestras tierras esta fechada desde antiguo y se han encontrado registros fósiles de Nerium oleander en Mallorca pertenecientes al oligoceno y al mioceno y en Tortosa del plioceno).
Hay adelfa en el mediterráneo desde el sur de Portugal hasta Mesopotamia, tanto en la zona norte como en la sur.
La adelfa tiene gran importancia en las formaciones de ribera en paisajes áridos o semiáridos, principalmente cuando la salinidad no es excesiva. Cuando esta es elevada le sustituyen con frecuencia especies del género Tamarix con las que en algunas zonas aparece asociada. También se da en zonas cálidas con cursos de agua de carácter permanente.
Podemos encontrar adelfa formando parte del sustrato arbustivo de choperas o olmedas o también en comunidades en las que es especie principal. La adelfa aparece acompañada de gramíneas como Brachipodium phoenicoides, la caña (Arundo donax), tarays (Tamarix gallica i T. africana), el granado (Punica granatum), la retama loca (Osyris alba), el sauzgatillo (Vitex agnus-castus).
Puede la adelfa formar grupos mas o menos densos con ejemplares de 4 m de altura, es el dominio Rubo-Nerietum oleandri. En este caso suelen acompañarle el taray (Tamarix gallica) y/o el taraje (Tamarix africana) junto con otras especies como la zarza (Rubus ulmifolius), la caña (Arundo donax), la retama loca (Osyris alba), el granado (Punica granatum), la olivarda (Inula viscosa)... Hay que destacar el caso del sauzgatillo con el que se asocia en zonas poco salinas y con elevada humedad ambiental en las que este puede ser la especie dominante en formaciones conocidas como sauzgatillares. En este caso el dominio se conoce como Leucojo-Viticetum (sauzgatillares con campanilla) y la adelfa aparece solo con funciones de acompañante.
No podemos hablar propiamente de técnicas silvícolas practicadas en esta especie. Por sus características se ha utilizado en restauración de zonas marginales en terrenos áridos o semiáridos principalmente en torrentes, aunque también se ha usado en fijación de dunas. Para el uso en reforestaciones protectoras presenta una serie de ventajas:
La reforestación se puede hacer a partir de plantas producidas de estaquilla o semilla, o plantando estas últimas directamente. Dado que se busca dar una buena protección se planta con densidades elevadas o formando franjas de protección que den abrigo a otras especies de porte arbóreo que podamos introducir posteriormente.
Por su resistencia tiene aplicaciones, como ya hemos dicho, en plantaciones protectoras en dunas, ramblas y torrentes siempre que exista un periodo con humedad y no mucha salinidad en el terreno.
También tiene aplicaciones como ornamental por no precisar muchos cuidados y por disponer de flor (en buenas condiciones) durante un largo periodo.
Es una planta tóxica y principalmente en sus hojas pueden encontrarse sustancias digitálicas que se han utilizado en medicina, aunque hay que tener en cuenta que su aplicación es muy peligrosa por ser las dosis medicinales próximas a las tóxicas. Estas dosis pueden causar parálisis cardiaca y la muerte, por lo cual la aplicación la ha de hacer un facultativo competente. El jugo de las hojas tiene un gusto amargo, es narcótico y tiene propiedades tonificantes para el corazón.
Si se mascan las hojas (hay que escupirlas después) provocan salivación. Se ha utilizado también mezclada con miel contra la sarna.
Su madera es dura, blanca, de densidad mediana y anillos anuales poco diferenciados y con ella se hacia carbón para obtener pólvora.
De aquello que siendo agradable a la vista luego no sienta mal o nos produce desengaños o disgustos se dice que "es como la adelfa".
Nerium se relaciona con Nereus, dios del mar y padre de las Nereidas. La querencia de esta especie por las riberas mediterráneas, puede justificar esta etimología.
Dice una leyenda que cuando Apuleyo fue transformado en asno, y quería comer rosas para volver a su forma humana, poco le faltó para engañarse con las de la adelfa. Al verlas desde lejos imaginó que lo eran y corrió con ansia a comerlas faltándole poco para hacerlo sin mirarla. En ese momento se dio cuenta de que eran veneno para los asnos y siéndolo en ese momento, burlado por la fortuna dejo la adelfa en paz y se volvió con la cabeza entre las orejas.
Dicen que la adelfa impidió ganar batallas a Alejandro Magno al envenenarse sus animales de carga con adelfa.
Parece ser también que los franceses no llegaron a tiempo a Sevilla para ayudar a sus fuerzas en Bailén y Rumblar por estar enfermas las tropas por comer aves cocinadas en ramas de adelfa.
Otras especies africanas de la familia también son muy tóxicas tal como pasa con las del género Strophantus que proporcionan a partir de sus semillas, veneno para las puntas de las flechas.