Antes
de continuar
se recomienda la lectura de los primeros capítulos del Exodo (1-15) ¿Qué elementos
de esta historia
un
poco
por
Walter Brueggemann
(si
todavía no los habéis leído)
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Las
ideas y las citas serán de
Walter
Brueggemann
La
imaginación profética
Para explicar lo que pasó en un rincón de Palestina
a finales del siglo I (antes de Cristo) hemos de viajar a Egipt, el Egipto
de las aguas del Nilo y de los Faraones de la XIX Dinastía (entre
1345 y 1200), y más concretamente a los reinados de Ramsés
II y de su hijo Merneptá. No sé si las investigaciones modernas
nos permiten imaginarnos a Ramsés II y a Moisés jugando juntos
de pequeños (Cfr. Ex 2, 10).
En esta "Catequesis Navideña" no precisamos estos detalles históricos... Tampoco es ahora el momento de saber los nombres y las edades de los "guías" que nos acompañan en este viaje a Egipto. No es sólo uno; al menos tenemos tres guías. Cada uno de ellos va a la suya; a veces se repiten, a veces dicen cosas diferentes, a veces uno se mete cuando el otro todavía está explicándonos alguna cosa... A los tres los conocemos -como pasa tan a menudo en tantos publos- por su mote: a uno le llamaban Yahvista, a otro Elohista, y a un tercero -que siempre quería tener la última palabra- le apellidaban Sacerdotal. Lo que nos interesa en esta "Catequesis Navideña" es darnos cuenta de cómo en estos quince primeros capítulos del Exodo se nos presenta una oposición radical entre el Faraón (sea cual sea su nombre) y Moisés, un disidente exiliado. Lo deberáimos decir mejor: no estamos ante una cuestión de personas, sino de programas. La oposición radical es entre el sistema faraónico y la alternativa mosaica. El sistema faraónico no es cosa del pasado; también existe hoy día en los actuales regímenes democráticos... Sistema caracterizado por "la religión del triunfalismo estático" que incluye necesariamente -para su supervivencia- "una política de opresión y explotación". En una religión del triunfalismo estático Dios y su Templo quedan integrados y controlados por el poder. Y la voz de Dios desde su Templo es la repetición incansable de que "todo va bien". Es la voz del "Dios cautivo" Mientras
el imperio pueda mantener la ficción de que las cosas marchan debidamente,
no habrá verdadera congoja ni se producirá una crítica
seria.
La señorita Blue ha llegado a ser una auténtica figura [en los medios radiofónicos], y siempre comienza y concluye sus programas con las mismas palabras: "Todo marcha estupendamente"... Este estribillo, ahora macaconamente impuesto, se convierte en un aval del "status quo" que sirve para engañar e insensibilizar.
En esta situación socio-política concreta,
la alternativa mosaica consiste en:
Moisés desenmascara a sus dioses (ni tienen poder ni son tales dioses) destruyendo así la mítica legitimidad del mundo social del Faraón, al demostrar que dicho régimen apela a instancias sancionadoras que en realidad no existen. Moisés le opone una política de justicia y compasión. Los participantes en el Exodo se vieron envueltos en la formación deliberada de una nueva comunidad social en la historia, que tenía que inventar leyes, pautas de gobierno y de orden, normas acerca del bien y del mal, criterios sancionadores de responsabilidad, en correspondencia a la visión de la libertad de Dios El programa de Moisés no consiste en liberar a un pequeño grupo de esclavos ayudándoles a huir del imperio, sino, más bien, en atacar a la conciencia del imperio, y nada menos que con el fin de acabar tanto con los usos sociales como con las pretensiones míticas de dicho imperio. La tradición profética es perfectamente consciente de que ofrece una verdadera alternativa La narración bíblica de la historia
de Moisés y el Faraón es la historia de una oposición.
Antes he hablado de una oposición entre Moisés y el Faraón
(personas), pero enseguida me he corregido y he hablado de una oposición
entre el sistema faraónico y la alternativa mosaica
(programas). Quizás ahora deba coregirme una vez más
y hablar de oposición entre Dios y el Faraón divinizado (entre
dos visiones de la realidad)
Esta oposición acaba expresándose en el canto final de
Moisés del capítulo 15. Este es un detalle muy importante
para nuestra "Catequesis Navideña", ya que es una invitación
a releer o a volver a cantar los cánticos "navideños" del
evangelio de Lucas con esta perspectiva de oposición y de ruptura
entre dos maneras de entender el mundo.
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La
leyenda de Moisès a través de los tiempos
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Supongo que ya habéis mirado
y remirado, tomando notas como hacía el obispo Spong, estos capítulos
del libro del Exodo, a la búsqueda de saber...
Ahora podemos ver otros detalles de esta historia
que no se encuentran en la Bíblia, pero sí en otros libros
y documentos de la literatura judía.
Flavio Josefo
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