Frida basta
acabo de encontrarme con las raíces de Frida con sus senos en flor con sus raídas vestiduras con sus arenas sudorosas con su cabellera en sueño con su vulva sus olas sus enojos
cómo me hubiese gustado vivir junto a ella para tomarle —hundido en su entrepierna— una foto con una cámara Laika durante alguna de sus batallas sus discursos sus orgasmos sus jadeos sus cejas sus ojos
la
tarde en vena permite
Frida en el vello de tu pubis quisiera yo ahora ahogarme
desnudamente
se masturbe cante ría sea |