EUZKADI

Los vascos vamos andando

y pensando.

Cuanto más nos atropellan,

más callamos.

¡Y hay que Ver cuánto pensamos

si no hablamos!

A veces, juntos, cantamos,

nos alzamos,

y nos extraña el silencio

en que estamos.

Nuestra pena, ¿es sólo nuestra?

¿Somos raros?

¿No es de todos nuestra ofensa,

hermano?

Una fuerza, otra provoca

más en alto;

una es verdad, y otra insulto

declarado.

No pondré mi otra mejilla,

golpeado,

proclamaré lo que es justo,

digno y claro,

y si a tanto nos provocan

con las armas en la mano

convocaré, pues luchamos

por lo bueno, justo y sano.