Las mujeres y
las computadoras
Siempre habra otro tipo que tendra una
mejor que la tuya.
Tardan mucho en arrancar y a veces nos
desesperan.
Te dejan colgado en el momento mas
inoportuno.
En muchas ocasiones hacen lo que les da la
gana, no lo que les pides.
Siempre nos acordaremos de la primera que
tuvimos.
Se bloquean y no hay quién las haga
cambiar de aptitud.
Tanto en una mujer como en una computadora
tenés que invertir mucho dinero.
Si tenés una buena te tienen envidia.
Al poco de tener una ya quieres una mejor.
Cuanto más adinerado seas mejor sera la
que obtengas.
Jamás olvidan algo, y si ocurre es que no
son muy fiables.
No podemos cambiarla tanto como
quisieramos.
Nadie entiende del todo bien como
funcionan.
Tanto las computadoras como las mijeres
tienen su propio lenguaje.
Si nos dejan tirado nos jode, pero en
cuanto podemos las abandonamos por otra mejor.
Ambas tienen una ranura para introducir ya
sea un diskette o un...
Las nuevas generaciones son cada vez
mejores.
Siempre necesitan muchísimo lugar para
sus cosas.
Ahora ambas son buenas para realizar las
labores de la casa.
Si no se protegen pueden coger un virus o
una venerea.
Las hay de diversos tamanos, formas,
pesos, colores...
Las dos cuando se enchufan al teléfono
parecen perder la noción del tiempo.
Las dos tienen sus metodos para no
calentarse.
Ninguna de las dos son capaces de pensar
por su cuenta.
Cada vez tienen mas poder y las hay en
mayor cantidad en despachos importantes.
Tanto asusta la posibilidad de que el
mundo sea dominado por computadoras como por mujeres.
Las mas caras suelen ser las mejores.
Una barata nos puede sacar del paso pero
preferiremos ahorrar durante mas tiempo para conseguir la
cara, pero para entonces ya se habrá quedado vieja.
Cada vez tienen formas mas redondeadas.
Cuando se conectan dos o mas, intercambian
todo tipo de información.
A ambas les encantan las tarjetas. A las
computadoras las de los periféricos y la mujer las de
crédito.
Si estás mucho tiempo frente a una acabas
con dolor de cabeza.
Tardas mucho más tiempo en ponerla a
punto que en disfrutarla.
Nunca te satisface del todo lo que has
hecho con ambas.